martes, julio 15, 2008

Poesía e internet


Esta mañana, en el marco de los Cursos de verano de la Universidad de Almería, he participado en una mesa redonda junto a Ramón Navarrete (profesor de la Universidad Pablo de Olavide) y José Bárcenas (Escritor y camarero del Café Gijón). Mi parte se centraba en los blogs como modelo actual de tertulia literaria. La cosa ha estado bastante entretenida. La pena es que no me acordé de colgarlo en La casa del nadador para que se enterase quien por aquí nada. Para curarme en salud, ya os digo que este jueves vuelvo a participar en un recital, según el programa, con Elena Medel, Raúl Quinto, Antonio Portela, Rubén Martín y Miguel Ángel Feria (todos ganadores del premio Andalucía Joven de Poesía). Los actos son en el Hotel Catedral. A las 18:00 seremos entrevistados por Juan Luis Valenzuela. A las 21:00 tendrá lugar un recital. Por video conferencia también participarán los poetas de San Salvador Krisma Mancía, Eleanor Rivera y Jorge Galán.

4 comentarios:

PEPE dijo...

Siento mucho no poder asistir, pero el jueves, casi con toda seguridad, voy a estar en Bailén (Jaén), en mi otra casa, con mi familia, recordando muchas cosas, también echando en falta a quienes ya no están, y, claro está, celebrando la celebérrima victoria española frente a los franceses (¿o acaso fue una derrota francesa?) ocurrida hace ahora doscientos años. Como la familia real ha decidido no ir, un republicano convencido como yo, este año, después de mucho tiempo, tiene la obligación de volver.

El marco de acto es precioso. Un día te contaré cómo se encontró el Aljibe árabe que se encuentra junto a los salones convencionales del Hotel Catedral. Son clientes nuestros y lo viví en primera persona.
Por cierto, y a vueltas con los minerales: todos los coleccionistas tenéis algo de fetichistas. Eso lo aprendí de uno, profesor, a más señas, al que odié de esa manera desaforada con la que se detesta al que se quiere, y al que luego no me dió tiempo a agradecerle todo lo que se atrevió a hacer por mí -el español piensa bien, pero tarde-. Este profesor ponía los minerales en las mesas del laboratorio y nos hacía pasar en grupos de diez, con un folio en blanco, para que identificáramos cada una de las piedras (bueno, minerales) que se mostraban en cajitas de cartón.
Yo, de latín y griego, nunca pude perdonárselo.

Un fuerte abrazo

Pepe

Juan Manuel Gil dijo...

amigo pepe, pues, en ese caso, te deseo una grata estacia en bailén. te sugiero que hagas una crónica en tu blog de esa celebración de aquella victoria. hoy he visto por la tele que la gente estaba indignadísima con la no-visita de ningún miembro de la casa real. has despertado mi curiosidad con eso de los aljibes. eso que cuentas sobre tu profesor y su modus operandi me suena tanto que me pone los pelos de punta. nos vemos, pronto. que ya está bien.

PEPE dijo...

Ser de Bailén y no estar imbuido por el fervor patrio de la batalla es difícil. Por mucho que se encuentre larvado o se niegue -más veces que el apostol Pedro lo he negado yo- allí está. Ya comprobarás que de esa impronta yo tampoco me he librado. Desde que tengo uso de razón -si es que lo sigo teniendo- em mí, siempre hay un cuadro de Casado del Alisal, un cántaro roto, una heroina de la batalla, María Bellido, que en mi pueblo tiene como trasunto figurado una escultura de una diosa romana que fue regalada por la monarquía española al pueblo de Bailén, representando la España Victoriosa, y están los zumacales, y la huerta de san Lázaro, y la noria, y el rumblar y las dehesas, y el cerro del ahorcado..., en definitiva, hechos y sitios de la batalla en donde crecí a pedradas.
Pero basta de inútiles melancolías.
Allá voy..., encantado de la inmersión.
Un abrazo
Pepe

Luna Miguel dijo...

Somos como Enjuto.



Ah, hace calor!